Inocente Palomita

De las personas más difíciles de aceptar
Ese soy yo.
Cómo cambiar, el modo, la manera
De ser, del devenir
Construyo a diario Castillos
En campos de arena
Y la marea a las 5 de la tarde
Hace su cumplido.
Acepto mi destino complaciente, eso creo.
Y la mañana me hace preso con promesas.
Y me fío, porque mañana no se fía.
Logro convencerme
Hay algo más
Y la arena mojada
Llena mis palmas
De cuartos de horas
Ahora vacías
Con diurnos efímeros
Y agradezco como no queriendo
La luz del aburrimiento, de lo cotidiano, de la rutina, del velo que engaña la niña creida
Porque acepto sin respingue la marea de las 5 de la tarde.

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