Hipotéticamente hablando es un necessery evil

Si Blancornelas fuera causa de un estudio sexual se encontraría que es un masturbador incontrolable. Su fantasia sería el narcotrafico. Lo digo porque de repente para acá lanzo su ponzoñosa tinta en contra de los Tucanes de Tijuana. No es que sea una de mis bandas favoritas, tienen dos que tres rolas ‘rescatables’ como algunas bloguitas dicen cuando se refieren a ciertos textos de algunos escritores. Esta vez Blancornelas y su equipo ‘independiente’ se molestarón porque los Tucanes justificarón la existencia de los narcos y el bien que hacen.

Yo no sé si los narcos son instituciones de beneficiencia pública, muchos menos soy una autoridad para andar moralizando a diestra y siniestra, para eso tenemos al Zeta al parecer.

Pero desgraciadamente el narcotrafico es un movimiento real, tangible y con presencia en la vida del mexicano, ahí esta, y durante mis mucho años de vivir en la frontera tuve muchas oportunides de ver ese movimiento en muchas de sus manifestaciones.

Mis viajes al exterior, han hecho que me formule una opinión al respecto, más bien se formulo mucho antes de que yo llegara a Suecia, se formulo durante mis años en ‘los’ (EEUU). Yo tengo un avido interes en seguir mucho politicas de exterior, y mucho más la de los EEUU. De esas lecturas, pude ver como los EEUU es el aluido gigante del Norte, el feroz animal sin escrupulos y el lobo vestido de oveja.

Fue cuando tuve necesidad de sacar un pasaporte para viajar cuando me di cuenta de un hecho que me causó pavor. La flojera me hizo visitar los tres campos militares más importantes para un Tijuanense, el campo militar que se encuentra en la Morelos, el Aguaje de la Tuna y el de Ensenada. Fui ahí donde me di cuenta de lo abismal de la miseria que el instituto castrense conserva esas instituciones en nuestras fronteras. Yo no puedo afirmar que he visto un campo militar gabacho, pero cualquiera que ande por el trolley de San Diego te podrá constatar que esas instituciones allá abarcan pueblos enteros, y el sólo ver sus puertas se da uno cuenta de que tanto empeño y orgullo tienen los gabachos en sus instituciones militares. Tijuana y Ensenada, en comparación, como dicen los gabachos, are a joke. Nunca me había sentido tan desprotejido en mi vida al ver con mis ojos los campos militares de Baja California.

Los narcotraficantes por necesidad necesitan andar huyendo de la ley todo el tiempo y por ende adquieren un conocimiento del terreno donde andan, andan pues donde la ley no. Es un conocimiento sin par y desde mi punto de vista necesario y uno que el gobierno debe de tomar en cuenta más no lo hace. Ellos y ellas conocen la tierra que pisan.

Durante la segunda guerra mundial, los gabachos planeaban entrar a Italia y para ello recurrierón (leer: Respuesta a Timur) a un elemento de Italia porque sabían que esos elementos conocian el terre, entraron por Sicilia y es de saber que los elementos a los que los aliados se tornarón, fue la mafia siciliense.

Mi opinión es que Baja California sería la primera en caer de pegarsele en gana a nuestro adorable vecino invadirnos, tu saca la cuenta, y hazme saber si destimo el valor de esos movimientos en caso de guerra.

:::::::::::::::::::

This entry was posted in Tj Xicano. Bookmark the permalink.