Este es el área:

Aquí, la solitud; allá la soledad, esos suelen llevársela bien, la verdad, pero hay veces que prefieren estar solos, vete tú a saber …

De este lado puedes poner tu jardín, o sea, un lugar donde puedas echar raíces, pero como verás no muchos suelen hacerlo por estos días, la neta, echar semilla cuesta caro por estos días.

De este otro lado puedes hacer lo que no puedes hacer de aquel lado, o sea perderte, ser alguien diferente, sentirte un poco extraño, aparte y cuando te canses de eso puedes regresar al otro lado que siempre estará allí por razones geológicas imposibles de reacomodar hasta que unos platos tectónicos se les pegue en gana de moverse.

Por esta esquina podrás juntar tus recuerdos de antaño, esta húmedo, como las más estrictas normas para guardar recuerdos lo exige, y hasta lugar para los malos, pues esos si que requieren mucho frío y oscuridad, la verdad, la verdad, quién quiere ver a esos? Por eso, la luz pega justo donde pueda ir una ventana del lado donde puedas acomodar tus mejores memorias.

El terreno está junto una barda, pero dime, aquí, qué barda no hay?

Así que considerarla parte de la fauna, es más hasta pollitos podrás ver cruzarse la calle de vez en cuando, sí, sí, ya sé, suele ser que son patos pero aquí es lo más ecológico y parte del medio ambiente y pues ni modo de exterminarlos ¿no?

¿Te gusta escribir y aspiras a ser escritor?

Bueno, como te digo, hasta esos vecinos que te presenté son lo más calladitos así que por ruidos no depares, si acaso un triste helicóptero dando vueltas buscando soñadores pero, dime, que área del mundo puede ofrecerte tanta emoción al precio de este terreno,

¡si es una ganga!

Si uno pudiera elegir donde nacer.

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